Palabras que se amontan y que calman,
risas de horas que fueron y que flotan,
a pesar de los ruidos y susurros...
Y suave y cercana me reconcilio con el dolor:
camino para llegar, para saltar y volver...
plataforma para el vacío y para el saber...
Y cuando se va, somos dos para un tango,
lo bueno se convierte en infinito,
y se siente en los nudos de la piel.
Gabriela Giorgeta
No hay comentarios:
Publicar un comentario